Karimabad dias de descanso

Con el uso y abuso de las reservas de los días anteriores, llegamos al idílico pueblo de Karimabad. Este pequeño pueblo, enclavado estrategicamente en la región de Hunza, una de las más bellas y espectaculares de Pakistan, nos proporciona un buen lugar para descansar e intentar recuperar las fuerzas perdidas por los resfriados, la fiebre y sobre esfuerzos realizados por ambos. Nuestra moral toca fondo, debido a los problemas de salud, que suelen trastocar el ánimo del que las padece. En este caso nos toca por partida doble y buscamos cualquier situación para discutir estúpidamente por cuestiones sin importancia, ya nada parece hacernos gracia. Machús sufre de nuevo fiebre y mal estar general, cosa que me inquieta, comienza a tomar antibióticos y optamos por quedar otros dos días más. Los templados días del valle nos sientan bien, las amables personas con su tranquilo carácter invitan a relajarse y tomar las cosas con más calma. Desde nuestra ventana contemplamos los blancas cumbres del Diran (7270 m), Golden y el Rakaposhi(7788 m). A nuestras espaldas asoman las verticales paredes cubiertas de amenazadores neveros y glaciares del Ultar II (7388m).
Karimabad es un pueblo construido en un alto a base de terrazas ganadas a las inclinadas laderas de las montañas colindantes. La benevolencia del clima permite el cultivo de cereales, albaricoques y patatas, siendo este tubérculo, el más cultivado y lucrativo de la zona. El dorado de las caducas hojas añaden más belleza y grandiosidad al conjunto de altas cumbres y profundos valles. En frente, al otro lado del río Hunza se encuentra el pueblo de Nagir, antiguo reino enemistado con sus vecinos de Karimabad, hasta que a mediados del siglo XX se encontró definitivamente la paz, aun así, los de esta parte siguen sin hablar demasiado bien de sus vecinos, aunque esto no es de extrañar ya que esta situación se da mas que frecuentemente en muchos lugares del mundo. Paseamos por algunas de las calles de este escalonado pueblo sin mucho que hacer ya que muchas tiendas y restaurantes se encuentran cerrados por falta de clientes. Debido a los últimos acontecimientos terroristas del país, la crisis mundial y los medios de comunicación que lo mezclan todo, esta pacífica región de Pakistán sufre la falta de turismo y muchos optan por no abrir y marchar a otros lugares en busca de un futuro más prometedor. Una vez más tenemos que decir que no todo lo que dicen los medios de comunicación es verdad, o no siempre informan de todo. Mañana si el tiempo y la salud lo permiten retomaremos la marcha hacia Gilgit, primera ciudad de importancia. Esto nos llevara dos dias ya que la llamada autopista del Karakorum esta destrozada por la dureza del entorno y las constantes obras de mejora. Desde Karimabad hay 110km unas cinco horas en coche. Una vez en Gilgit nos mimetizaremos con el traje tipico del pais y volveremos a informar, deleitar y entretener con nuevas fotos y aventuras.
De momento Pakistan nos recibe con paz, respeto y alegria.

¿Alguien sabe que famoso actor visitó el monasterio de Karuna en Katmandhu? El primero en contestar gana una fabulosa foto recuerdo que enviaremos a su dirección.